EXTRAORDINARIOS 5 AÑOS

Han pasado varios meses sin que pueda escribir, también muchas cosas que no me han permitido dar seguimiento a cosas entre tu y yo mi pequeño. Pero siempre llega el momento en que uno aprende a darse su tiempo, esa es una lección importante que no debemos olvidar, ambos.

He recordado que tan importante es hacer algunos altos para poder seguir contemplando y apreciando la vida. Y desde que naciste esto se ha hecho vital, pues he comprendido la fragilidad de la vida, tal vez por eso nunca dejo de observarte, despierto, dormido, jugando, enojado, enfermo, como sea, he aprendido que observarte siempre es mi mejor aliada.

Vi cuanto te afecto todos los cambios que tuvimos que hacer en estas últimas fechas, realmente a mi también me fueron desagradables. Como en otras ocasiones caí en el desanimo porque las cosas no resultaban como las planeábamos. Pero así es la vida, mi pequeño. La vida siempre resulta algo diferente a lo que planeábamos; sin embargo eso no significa que sea catastrófico, a veces, tan solo, significa que tienes que re direccionarte.

Está vez hicimos un alto muy consciente, cambiamos el camino porque era necesario, la meta sigue siendo la misma: VIVIR DESPIERTOS. Sin embargo, en ocasiones el mismo camino ya no es suficiente, en ocasiones está tan afectado que hay que explorar otros nuevos, o simplemente se hace necesario cambiar el camino porque te has dado cuenta que a tu alrededor hay otros más... y eso puede estar bien.

Realmente nunca sabremos que encontraremos, cambiar de camino no significa que todo será agradable, pero creo que como en todo espacio, lo ideal es aprender a ver lo positivo de cada cual. Esta vez, fue agradable hacer algunos cambios, perdonar, descubrir, y atreverse a abrir nuevamente la ventana. Era importante que no camináramos con la etiqueta de victimas, sino de personas realmente resilientes, pues el segundo mensaje que te quiero transmitir es que: La discapacidad no te hace victima, tan solo te muestra otra situación de vida.

¿Porqué lo hago? porque cuando estabas en mi vientre me prometí mostrarte lo bello de la vida, y tu cada día te has aferrado a vivir con todo el entusiasmo posible. Tu no comprendes que significa la palabra discapacidad, ni tampoco te acongojas cuando las personas se te quedan viendo de una manera algo "extraña", tampoco comprender cuando los chicxs de tu edad te rechazan, tu VIVES. por lo que ¿Quién sería yo si dejo a un lado mi propia promesa? dejaría de ser Sofía, y al dejar de ser yo, no podría ser la madre que he decidido ser.

El resultado ha sido muy agradable: primero estar tan solo contigo y descubrir que tan parecidos somos, que tan sensibles y aguerridos podemos ser al proponernos algo, maravillarnos mutuamente por reencontrarnos y saber que nos amamos a nuestra manera y que nos hemos aprendido a comunicar. Confirmar que nos seguiremos esforzando en cualquier camino, sea el que sea, ya sea porque nosotros decidamos cambiar de camino o porque la vida misma no fuerce. Que orgullo ser tu madre mi querido Elliot Damián.

Fue hermoso encontrar en el camino a completos desconocidos que nos tendieron una mano sin ningún tipo de lastima sino con toda la calidez humana, desde el chico que amablemente te bajó de las escaleras con todo y tu silla de ruedas, hasta la señora amable que te regaló un paleta y platicó contigo. Desde la señora que con un abrazo fraterno nos brindó todo el ánimo posible de manera genuina, hasta las personas que nos han acompañado en esta travesía sin tener un número especifico. 

Pero lo más hermoso fue poder caminar junto a ti, a tu paso, a tu ritmo, sin presiones, sin querer cumplir expectativas, simplemente yo siendo tu madre, simplemente tu siendo mi hijo.

Eso es lo que yo recuerdo que quería mostrarte: que si tu observas, con detenimiento, quietud y serenidad suficiente, serás capaz de ver el lado amoroso de cada Ser humano, descubriendo la belleza de la humanidad, como los bichos que encuentras en las hojas de los árboles, los que, si observas, son extraordinarios... esa es el tercer mensaje de este día: EL MUNDO ES EXTRAORDINARIO Y TU LO ERES EN TU SER... y eso mi pequeño Elliot, eso quisiera seguir mostrándote del mundo y de ti...

¡Felices 5 años mi vida!... aún tenemos un mundo por descubrir...

Te amamos papá y yo (mamá)